El desarrollo de la identidad de marca se basa en la idea de lo auténtico. Todo nombre debe tener una idea que le acompañe, una manera de comunicar, de expresarse y de ser que transmita de forma clara su propuesta de valor. Por tanto, el trabajo que define a auténtico se debe reflejar en los distintos soportes y mensajes que se generan de cada proyecto. Cómo se comunican las soluciones lumínicas es una parte más del discurso auténtico a transmitir.

Para el rediseño de la identidad de auténtico tomamos como eje conceptual el ciclo de la luz natural: amanecer, cenit y atardecer, sin olvidar el equilibrio entre ingeniería y creatividad que trasladamos mediante una tipografía a medida que nacía del símbolo gráfico.